Extreme Bardenas 2013

Extreme Bardenas

Otra más a la saca, y van cinco. Cada cual distinta: con sus anécdotas, recorridos, gente...pero la misma aventura.

Este año la Extreme cambiaba de reponsables de organización: nuevos aires, ideas y ganas. Hay veces en los que si se quiere hacer perdurar una prueba, se necesita sangre nueva, y un cambio que logre frescura para seguir por el buen camino. Creo que se ha acertado, y se ha notado esa nueva ilusión por querer seguir haciendo una prueba excepcional, en cuanto a organización, paraje, y gentes.
Comenzó el día con la llamada perdida que significaba que en 10 minutos Unai y Asier estarían en mi casa...eran las 4:45 de la mañana, y según llegaron...las primeras risas. Vimos un grupo que venía de cerrar los últimos bares, oímos un plafff, y después de que miráramos a nuestra derecha un " me caí"... jajajajaj, no me extraña. Menuda papa llevaban, así que ni sé el tiempo que nos pudimos reír cada vez que alguno de nosotros repetía lo de..." me caí".











Llegamos a las 7:20, y me fui a por el dorsal...el único fallo que puedo achacar a esta marcha es que siempre pasa igual, no hay tallas de camisetas. Creo que un buen cambio para el próximo año sería que cuando se hace la preinscripción, se incluya la talla de camiseta, así ellos irían a tiro hecho, y nosotros tendríamos la talla solicitada. En mi caso, por suerte, tuve la "M", pero Unai, y Asier se tuvieron que conformar con una "XXL". Una pena porque la camiseta de esta edición era muy chula.

Singular bidón el que nos dieron al recoger el dorsal

Más tarde me encontré con Ana y con Ramón, y tras charlar un ratito me fui a vestir.
Llegamos tarde a nuestra cita con la gente del Foro Extreme Bardenas, y no había ya nadie en las escaleras, así que me adelanté con mi cámara para sacarles una foto. No me situé con ellos en el lugar reservado para el foro, tras el Club Ciclista Arguedano, porque me daba un poco vergüenza. No llevaba el maillot del foro, así que les comenté que ya nos encontraríamos por el camino.

Eran ya las 8.30, y esto se ponía en marcha. Chupinazo inicial seguido de una lluvia de confeti, y música de Europe, cómo no "The final coutdow"...ya estaba acelerado jejejej.

Salimos poco a poco...y cuando estábamos a punto de coger la pista de tierra, nos encontramos con Ramón, y seguimos con el durante todo el recorrido.

Fuente: Paco Galan

fuente deporbox

Todo este primer tramo me gustó mucho. Es verdad que íbamos un poco juntos, y que siempre hay gente que no sabe rodar en pelotón o es incapaz de decir por dónde va a pasar, de modo que se vivió alguna  situación peligrosa.

Espero que el incidente del chico que vimos con sangre en la cara por un golpe, al final se quedase en "chapa y pintura"...Por lo demás, yo me lo pasé como un enano, con las primeras pendientes, sorteando a gente, y después con las bajadas, animando a los que había pasado antes mientras les hacía unas fotos.

Y así llegamos al avituallamiento del kilómetro 24: un acuarius, la foto de rigor y "avanti tutti".

Me lo estaba pasando muy bien. A ratos iba con Ramón hablando, otras con Unai. Asier aguantaba bastante bien los tirones que le arreábamos. El ambiente era genial y nos íbamos encontrando con gente del foro. Ana se había caído por culpa de alguien que le había dado un empujón, y bueno...tenía un pequeño rasponazo. Sin quererlo, nos plantamos en el tercer avituallamiento. Ya llevábamos más de la mitad, y esto estaba chupao.

Empezaba a cascar Lorenzo. Al principio habíamos tenido una brisita que en nada recordaba al viento del año pasado, pero ahora empezaba a retirarse, y el sol, cobró todo el protagonismo (como debe ser) hasta que, al final, llegamos a alcanzar los 36ºC - que no estaba nada mal.

Hay veces, y éste ha sido el caso, que estás tan a gusto rodando con la gente y echando unas risas, que se te van pasando tanto los kilómetros y el tiempo, y ni te enteras.
Pasamos el cuarto avituallamiento, y nos unimos a una grupeta. Al ver que no daban un relevo al que iba delante, me puse a tirar de todo el grupo. Yo estaba con mucha fuerza, esto no es la Euskobike, y en esta época a mí el sol me encanta, y me da ese plus. Después se pasó Unai y luego Ramón. Al final, el grupo se medio deshizo. Al subir otra cuestilla, desde la que saqué unas fotos, estábamos ya en Castildetierra.

En el kilómetro 80, se pinchó mi rueda delantera. No sé, líquido antipinchazos recién puesto... Total que puse una cámara y pasé de perder tiempo hinchando, para luego, tener que cambiar cámara. Especialmente teniendo en cuenta que quedaban 25 kilómetros.
Llegamos al quinto avituallamiento, comimos algo, y seguimos. A dos kilómetros de la virgen del Yugo, había otro avituallamiento líquido. Desde ahí al Yugo no quedaba nada, así que me puse a tirar y subí el Yugo bastante rápido. Había gente animando con bocinas a los que quedábamos, y arriba, me uní yo también a animar a los ciclistas mientras sacaba fotos.

Ya era todo bajada, con algún que otro repechillo, y así llegamos a Arguedas. Mirando de reojillo, vi el brillo en los ojos de todos, así que aceleramos el ritmo para disputar un sprint. En la última curva, me pasó Unai, y no lo pude pillar, jejejeje: "¡Te espero en la próxima!"
Una vez que llegamos todos, y de una pieza, nos fuimos a comer esa pasta rica que algunas marchas tendrían que copiar. No cuesta nada hacer pasta con  tomate y carne, quedas de lujo, y estaba de muerte, tirados a la sombra, y comentando de todo un poco.

Poco más puedo añadir sobre esta marcha. Como siempre, muy bien organizada, con un pueblo y unos voluntarios volcados, avituallamientos abundantes. Buen ambiente, y lo mejor, reencontrarse con gente conocida con la que siempre da gusto estar.

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