Clasica cicloturista lagos de covadonga 2011 (Crónica)

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Me gusta mayo, el tiempo cambia, cada vez tenemos más luz y sol…y en mayo está esta fantástica cicloturista que a mí particularmente es una de las que me encantan. Este año he ido con Asier, alquilamos una casita para el fin de semana y nos fuimos con los peques.

Llegamos el viernes, dejamos las cosas y a por el dorsal a Cangas de Onís, ya se respiraba ese ambiente ciclista por todas las esquinas, entramos en el polideportivo, recogemos todo y a pasar por los stands a ver que novedades hay, nos encontramos con Aritz un amigo de mi hermano, y al final tras una cena de pasta amenizada con una sidra un tanto especial nos fuimos a la cama, pensando en qué tiempo hará el sábado.

Me levanté el sábado y salí a la calle solo para ver qué día hacía….sol jejeje hoy de blanco, Asier es un poco escéptico, pero yo en cuanto veo un rayo….

Después del desayuno, bicis al coche, traje de faena y a Cangas, tras unos ajustes en la bici a la línea de salida, cuanta gente madre mía, han dicho que unos 3400 al final, y como hemos llegado justos estamos a cola de pelotón, a mí la verdad es que me gusta más estar por el medio en la salida, pero bueno que se le va a hacer.
  

Tras el homenaje a Rubiera, a eso de las 9:10 salimos, los primeros metros casi parados hasta pasar por el arco, pero después de salir de Cangas… a toda máquina. Asier me mira y mira el cuentakilómetros… si, si, vamos a casi 40 km/h, es impresionante cómo se rueda ahora en pelotón dirección Ribadesella, como la carretera pica para abajo pues ya se sabe a volar se ha dicho.

Pasamos Arriondas, Ribadesella… todo el rato en grupitos que se van formando, Asier en una de estas se queda ya que se le ha salido la cadena, una pena íbamos en un grupo majo, seguimos y pasando Llanes llegamos al avituallamiento de Parres. Allí nos encontramos con Aritz y tras ver las medias que llevamos ( la nuestra 30 km/h), echamos unas risas sobre las bicis y las fuerzas de cada uno.

Aritz se pira y un poco más tarde nos vamos nosotros, saliendo de Parres ya empieza a picar un poco para arriba, vamos a empezar la Torneria, para mí uno de los puertos más bonitos que he subido, me encanta la subida a la Torneria desde Parres, son más o menos unos 6 kilómetros con unas pendientes medias del 5%, 7%, 10%, con unas últimas rampas de porcentaje 16%. Es en la Torneria donde te vas a dar cuenta de cómo vas, el caso es que me voy alejando poco a poco de Asier (cada uno a su ritmo), y justo me encuentro con Aritz, le miro los desarrollos y veo que va con todo, pufff, no va bien me dice, vamos hablando un poco, manteniendo el ritmo y se queda, por lo tanto al final voy solo pasando a gente que se va quedando, alguno ya andando, y voy para el final, último kilómetro, aquí me encuentro con la gente del año pasado de los cencerros, qué caña, animando todo el rato “ lo pequeño es grande…” jejejeje, me encanta.

Me encuentro con un chico que me dice si soy el del año pasado y si estuve también en Sabiñánigo, claro que sí hombre, ese era yo, y llegamos al final.

Me paro para esperar a Asier, a los 10 minutos llega Aritz, nos hacemos unas fotos, hablamos de cómo ha sido la subida, él comienza a bajar y yo le espero a Asier, el día está raro, el alto de la Tornería está con niebla y el descenso parece que va a ser algo peligroso a priori, justo llega Asier a los 20 minutos, vamos para abajo me dice, le digo que cuidado, y nos ponemos a bajar. Al principio con un poco de respeto, pero me voy dando cuenta de que la carretera está muy bien y que se puede ir mas rápido, acabamos de bajar y empieza de la misma un tramo corto para empezar a subir la Robellada…. Nunca me ha gustado esta subida, parece que no estás subiendo nada, poco porcentaje pero molesto como un falso llano que no te enteras, cogemos a un grupo, veo que van a un ritmo normalito, y me voy para delante, me quedo con el que iba tirando del grupo y le digo a ver si así vamos bien, me dice que sí que así va muy bien, entonces viendo que Asier está a cola de grupo, seguimos tranquilos a ese ritmo, me pongo a hablar con el  tipo que tiraba a ver de donde era, las marchas cicloturistas, vamos de todo un poco, el caso es que veo que Aritz está a unos  treinta metros, miro para atrás y veo que Asier no está, así que marcho para delante a cogerle a Aritz, estamos ya otra vez los dos hablando, me dice que va mal, que este año a entrenado poco, el caso es que nos ponemos a hablar de la gente, del ambiente tan bueno y a esto nos ha cogido un grupo de 4 tíos, que al oírnos empieza uno, si, si buen rollo pero a un kilómetro de la cima voy a lanzar un ataque, a lo que le replico en plan coña que parece mentira que un tío que va en plegable tenga que tirar de un grupo, unas risas, el caso es que así por la chorrada nos quedan solo 300 metros para la cima, se me ha pasado en nada, y se me quedan todos…oye que lo del ataque era broma, jajajaja, pero si estoy yendo al mismo ritmo sois vosotros que os quedáis. Total, que estamos arriba tomándonos algo en el segundo avituallamiento y al de un tiempo llega Asier, es lo que tiene que al final el que va el último siempre consigue fotos.

Bueno  Aritz y éstos ya se han ido, y nosotros nos ponemos a bajar, aquí a saco que la carretera es ancha y está muy bien, y así poco a poco cogemos el llano que nos llevará a Soto de Cangas donde nos esperan Itzi, Patricia y los peques, nos sacamos unas fotos, y ya solo nos queda el falso llano este de 7 kilómetros hasta lo que va a ser ya la subida a los lagos.

Estamos ya a pie de Covadonga, tras los ánimos de la gente como siempre aquí impresionante, y el saludo que para mí ya es un clásico de esta marcha a la Santina con la frente, miro para atrás, le veo a Asier y con la mano le digo “au revoir”, nos vemos arriba.

Bueno 12 kilómetros para exprimirme al máximo, este año quiero subir en una hora y diez minutos más o menos, y empiezo muy bien, voy a buen ritmo, paso el Mirador de los Canónigos…, me veo bien, y a esto me doy cuenta de que Aritz está justo delante mio, cuando le cojo se da la vuelta, dice que no puede más, pues nada hasta otra, nos vemos... sigo subiendo con los ánimos de la gente y llega La Huesera,  lo meto todo para ir más tranquilo y guardar fuerzas en todo este tramo, hasta el Mirador de la Reina, pero despues algo pasa, no cojo ritmo, si subo unos ó dos piñones voy un poco forzado, pero si los bajo voy demasiado suelto, el caso es que de aquí hasta el final no volveré a coger el ritmo, pero la verdad es que no estoy nada cansado, qué raro, no sé….
La leche! empiezan a venir vacas por la carretera, esto parece San Fermín pero subiendo, me voy fijando en los terneros porque sus madres tirarán para donde vayan ellos, bueno al fin pasa todo esto y ya solo me quedan dos kilómetros, ya veo los lagos…y tras la última bajada empiezo la subida a meta a tope, pufff pues ya está, la subida la he acabado en una hora treinta minutos, peor de lo que me esperaba pero bueno tampoco pasa nada, me tomo ya la coca cola de rigor y me voy a tumbar a un prado esperando que llegue Asier, la verdad es que hoy tampoco nos podemos quejar, en meta un sol de escándalo, qué gozada, me gusta mucho mas subir lagos con este tiempo.

Ya llega Asier, le da un malo al pensar que había acabado y le falta la última cuesta jajaja, bueno al final ha acabado que era su reto, así que tras la bajada a Cangas coger la bolsa de avituallamiento y dejar el chip, les vemos a Itzi y Patricia en una terraza con los peques, nos hacemos unas fotillos y nos vamos al final para casa, a la noche acabamos cenando una buena comida asturiana con su tabla de quesos y su sidriña….acabó lagos y, como siempre, nunca me cansaré de decir que me encanta Asturias.