martes, 16 de febrero de 2016

Test Fat Bike

En la martxa de Mendibike, y de la mano de la tienda de bicis Uribike UBK, pude probar una fat bike de la marca Trek. Como me quedé con las ganas de ver cómo se comportaba en otras situaciones, la volví a coger para probarla más exhaustivamente. Comparto con vosotros aquí las conclusiones a las que he llegado:
Lo primero la bici que he probado:
Era una Trek Farley 5, la fatty de Trek más baja de gama, cuesta 1800€ y pesa 15 kg.
Las características de la bici las podéis encontrar en la página de Trek
Cuando ves una de estas bicis, te da la sensación de que va a ser un muerto, algo súperpesado que vas a tener que estar empujando todo el rato...y por otra parte, la anchura de ruedas te hace pensar que se lo va a tragar todo en el monte.
Nada más montarte y ajustar el sillín, miras justo al suelo y ves la separación que hay en las bielas.

Parece de que vas a ir con las piernas separadas... Pero no es así, en el momento que te pones a dar pedales, ni lo notas.
Recorrí un circuito que ya conocía y en el cual, había diversas zonas por las cuales se podría probar de lujo la bici, y al principio ni noté el cambio. Más tarde, en algunas subidas duras no me agarró tanto la rueda como yo pensaba. Por otro lado, se necesita un aprendizaje previo para ver con qué presión se comporta mejor la bici. Evidentemente, no podemos estar quitando y poniendo presión todo el rato a las ruedas, pero sí comprobar qué presión va mejor en todas las situaciones.
Una vez hecho esto, al final la presión quedó entre 0.5/0.6 bar, lo demás fue coser y cantar. Yo llevo una talla S de bici, ésta era una talla M. El sillín lo llevaba lo más bajo que dejaba y la verdad...me dio la sensación de que era mi talla. La posición, muy cómoda. Las subidas se hacían muy amenas, a pesar de los 15 kilos, no daba la sensación de lastrar demasiado, y el manillar, bastante ancho para mi costumbre, hacia que fuera todo mucho más fácil y estable tanto en terreno suelto como en piedras y trialeras.

Y las bajadas fueron impresionantes...te da la sensación de que no hay agujeros, baches, ramas...todo se lo traga. Si que es verdad que necesitas un buen tren superior y fuerza para controlar la bici en las bajadas. Si la dejas, tira todo el rato hacia delante y tú tienes que estar en todo momento controlando con los brazos, ya qué por lo demás...ni te tienes que preocupar.

En conclusión, es una bici muy juguetona y divertida, las ruedas hacen que bajando estés mucho más seguro ya que la bici en sí es muy estable. Por ponerle un pero, no tengo ni idea de qué pasará cuando se pinche, jejeje. Si es más o menos fácil cambiar una cámara, me imagino que habrá repuestos.
Ahora quedaría pendiente probar una de 10 kilos y ver si realmente merecería la pena tener una amortiguación delantera. Está claro que estas bicis no van a sustituir a nuestras BTT'S, pero dejando a un lado el factor competitivo, y cambiándolo por el factor diversión...tienen su aquel.